martes, 7 de febrero de 2012

Lilypad, la ciudad nenufar

Para todos aquellos que estén aterrados por el cambio climático aquí llega un proyecto tranquilizador, Lylipad, un diseño del arquitecto Vincent Callebaut, quien la presenta como una ecópolis flotante para refugiados climáticos.
Vincent Callebaut es un arquitecto que proyecta una obra moderna, que parece estar más cerca de la ciencia ficción, pero que en realidad constituye una respuesta inmediata a una de las consecuencias más graves del calentamiento global: el derretimiento de los polos y el consiguiente aumento del nivel marítimo y océanico. Y partiendo desde esta premisa -teniendo en cuenta de que ciertas regiones del mundo como los países bajos y los Emiratos Arabes unidos en estos días están obligados a gastar millones de euros para construir barreras de arena para protegerlos del avance de las aguas, Callebaut llevó a cabo una -solución sostenible- para el aumento de los mares: el proyecto Lilypad. 

Se trata de una -ecópolis- que se presenta como una ciudad flotante. Una de las particularidades de esta ciudad flotante es que se mueve constantemente. Es una ciudad nómada. Lilypad viaja en la linea de las corrientes oceánicas frías y calientes.

Esta ciudad anfibia es capaz de alojar a 50,000 habitantes y permite desarrollar su fauna y flora en torno a una laguna central -artificial-, que se origina de la depuración de las aguas de la lluvia. Esta laguna en realidad es el contacto con la profundidad oceánica. También cuenta con tres puertos y tres montañas que incluye, entre otros, tiendas comerciales y los entretenimientos. Las viviendas están situadas en jardines suspendidos y alrededor de las mismas existe una red de calles y callejones. Para lograr la propia subsistencia, la ecópolis cuenta con superficies de cultivo para crear fuentes de alimentación. La otra fuente de ingreso es el comercio con las ciudades costeras que va recorriendo. 

 El arquitecto también piensa en una ciudad que no emitiese ningún tipo de residuo, aprovechando combustibles como la biomasa para mover los motores de esta isla móvil.

La Lilypad se sirve de todos los avances tecnológicos verdes existentes para funcionar, entre ellos, incorpora energía solar, eólica y maremotriz, además de sistemas de iluminación mediante LEDs, reciclaje de desechos y otras maravillas. Además, no sólo no emite dióxido de carbono sino que está preparada para procesar el carbono existente en la atmósfera gracias a su cubierta exterior de dióxido de titanio.
El proyecto es sin dudas genial, aunque la idea de tener que recurrir a este tipo de construcciones parte de una premisa apocalíptica y oscura que, esperemos, no sea el destino de la humanidad.

Nueva técnica en 3D para identificar cadáveres


En tres segmentos, la piel, un TAC facial en 3D y el cráneo. | U.G.
Científicos de la Universidad de Granada han 'remozado' la antigua técnica de identificación de cadáveres que consiste en comparar el cráneo que se encuentra con una fotografía hasta conseguir que sea tan fiable, y mucho más económica, que las pruebas de ADN.
El sistema, reconocen los investigadores, había caído en desuso porque se quedó obsoleto. Tras cinco años de trabajo, Fernando J. Navarro Merino, del Departamento de Medicina Legal de Granada, ha logrado localizar y digitalizar los puntos que sirven de referencia tanto en los cráneos como en las imágenes, desarrollando una metodología que permite realizar identificaciones en no más de una hora gracias a un escáner en tres dimensiones.
Hasta ahora, los puntos de referencia que se tienen en cuenta para analizar un cráneo no se corresponden totalmente con los de la piel o los ojos, lo que dificulta saber cómo eran los individuos cuando estaban vivos. Navarro Merino utilizó una muestra de 500 personas de origen mediterráneo, haciendo tomografías en 3D y comparando los puntos de los huesos craneales con los de los rostros.
Análisis barato y fiable
Descubrió así que la relación entre ellos no era perpendicular, como se ha pensado hasta ahora, sino en ángulo. "Son esos vectores, su dirección, sentido y distancia, los que dan fiabilidad a las mediciones", explica a ELMUNDO.es.
"Se trata de un análisis mucho menos costoso que los estudios genéticos de ADN, y adémás es rápido y fiable. Y, en todo caso, sirve para hacer descartes previos a los genéticos, lo que supone un ahorro", argumenta.
Los 500 participantes se escogieron de una muestra de estudios tomográficos (TAC) de los hospitales de Castilla-La Mancha, con los que tiene un acuerdo la Universidad de Granada. Los científicos crearon una base de datos con las coordenadas en 3D tanto de los puntos craneales como los faciales y obtuvieron los vectores.
Para ver si la técnica funcionaba, hicieron un escáner en 3D del cráneo de un indiviudo fallecido y crearon un modelo virtual sobre el que localizaron y marcaron todos los puntos craneales (craneométricos), haciendo lo mismo en la fotografía de esta misma persona que facilitó la familia.
Los resultados fueron excepcionales. De hecho, ya se ha patentado el 'software' de la nueva técnica y países como México, donde hay un alto número de delitos en los que hay que identificar a las víctimas, ya han mostrado un gran interés. De hecho, el equipo ya está pensando en buscar los 'vectores' de otras poblaciones humanas, dado que varían según el grupo humano.
Navarro Merino señala que para que la técnica tenga éxito debe conservarse el cráneo entero, pero precisamente esta es una de las partes del cuerpo más duras, por lo que suelen estar en buen estado.
En España, también podría ser de utilidad para los que ahora están buscando a familiares que fueron asesinados durante la Guerra Civil, muchos de ellos enterrados en fosas comunes donde hay un revoltijo de huesos. El alto coste de los análisis de ADN ha sido, precisamente, uno de los problemas con los que se han encontrado los descendientes interesados en enterrar a sus muertos.
La investigación, presentada como tesis por Navarro Merino, ha sido dirigida por los profesores Miguel C. Botella López, Inmaculada Alemán Aguilera y Sergio Damas Arroyo.

¿ A dónde va la luz cuando apagamos el interruptor?

La luz no es como una nube de niebla que cuelga del aire, es una corriente contínua de fotones emitidos por un bombillo en el medio de una habitación. Cada fotón viaja en una línea recta y, un par de nanosegundos después, alcanza una pared.

Allí, puede que sea absorbidos por uno de los electrones de un átomo de la pared, lo cual hace que el átomo vibre un poco más rápido y caliente levemente la pared. O, puede ser rebotado. Cuando la luz está encendida este proceso tiene lugar de forma constante. Una pequeña fracción de estos fotones rebotados va a parar al ojo humano, donde son absorbidos por la retina, que hace que veamos la habitación iluminada. 
Cuando se apaga la luz, no se emiten nuevos fotones y los que ya fueron emitidos rebotan alrededor un par de veces hasta que todos son absorbidos.